Estudios recientes señalan que más de 5 gramos de plástico (el equivalente a una tarjeta de crédito) entran a nuestros cuerpos semanalmente, a través la comida, bebidas, ropa, productos de aseo personal, entre otros; con un impacto nocivo para nuestros órganos, nuestra salud y otros ecosistemas.
Para generar conciencia ante esta dramática realidad, en el marco del Proyecto Patrimonio Natural Azul, el pasado 11 y 12 de marzo, se llevó a cabo en Panamá el Simposio Nacional de Plástico II, un evento innovador que buscó identificar soluciones efectivas para la protección de la biodiversidad marino-costera.
En esta segunda edición, el foco estuvo puesto en promover buenas prácticas nacionales e internacionales y generar alianzas, a través de actividades disruptivas, interactivas y colaborativas, propiciando el aprendizaje y la reflexión de los más de 200 asistentes, representantes de la sociedad civil, la academia, empresas privadas, gobierno, organismos multilaterales y estudiantes que participaron en los diferentes formatos que ofreció el evento.
Dos días disruptivos para crear conciencia
El primer día estuvo compuesto por tres segmentos, separados por actividades poco convencionales para propiciar la reflexión de los asistentes.
Durante la mañana, una serie de 15 charlas en formatos TED Talks y Pechakucha fueron el escenario propicio para que los expertos compartieran con la audiencia información clave sobre el impacto del plástico en diferentes sectores. Una de las voces destacadas fue la de Marisol Landau, pionera del reciclaje en Panamá, quien explicó la evaluación del rol del plástico en la crisis ambiental, con un recorrido histórico que enfatizó la disyuntiva entre la conveniencia y la conciencia, concluyendo que “el reciclaje no es la solución”. Por su parte, el Dr. Nicolás Olea, catedrático de la Universidad de Granada, hizo una reveladora presentación sobre el impacto de la exposición al plástico en humanos, los peligros a los que estamos expuestos por lo que él denomina “la orgía del plástico”, haciendo referencia al abuso inconsciente y conscientes en ropa, gramas sintéticas, productos de aseo personal, entre otros, y las consecuencias de la presencia de micro plásticos en nuestro cuerpo, incluyendo el corazón, la sangre, la placenta y hasta en la leche materna.
Durante el almuerzo los participantes fueron sorprendidos por obstáculos impuestos por “redes fantasmas” (así se les dice a las que han sido abandonadas en mares, lagos y ríos) que bloquearon su camino y dificultaron el acceso a la comida, tal y como padecen muchas aves y peces a consecuencia del irresponsable manejo y abandono de estas trampas en nuestros océanos.
En la tarde, cuatro paneles de expertos compartieron sus experiencias sobre las buenas prácticas en estrategias de comunicación, programas de educación y experiencias de éxito en el mundo para la gestión responsable del plástico, así como los retos y oportunidades en organizaciones donde se promueve la responsabilidad extendida del productor.
A lo largo de la jornada, 12 iniciativas panameñas, que brindan soluciones sostenibles al mercado (como: preloved fashion, artículos para niños y de higiene femenina libre de plásticos, envases y envoltorios sostenibles, artículos “upcycled” para el sector hotelero y de restaurantes, servicios de composta, reparación de computadores, entre otros), tuvieron la oportunidad de dar a conocer y ofrecer sus productos y servicios a través del denominado “Mercadito Circular”.
Para cerrar el primer día, se organizó una noche de networking con propósito, denominado #HablemosSinFiltro, donde seis organizaciones contaron las lecciones aprendidas de sus errores, en un espacio en colaboración con el laboratorio de soluciones del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que se convirtió en el volumen 2 del Círculo plástico. Esta iniciativa del PNUD busca conectar e integrar las diversas visiones y actores del ecosistema de circularidad en plásticos de Panamá, facilitando el descubrimiento, la colaboración y la acción colectiva que aceleren los cambios que necesitamos para crear un mundo libre de contaminación por plásticos.
Entre otros de los logros de este segundo Simposios es importante destacar que el evento cumplió su compromiso con la sostenibilidad, adoptando la meta de ser cero residuos al vertedero. Esta iniciativa se materializó a través del uso de materiales reutilizables y reciclados en la ejecución, decoración y actividades disruptivas realizadas, además del compostaje, coprocesamiento y reciclaje de los residuos generados, incluyendo los de los proveedores, para minimizar el impacto ambiental en toda la cadena; gracias a alianzas estratégicas forjadas en el marco del evento.
Además, el simposio ofreció un espacio propicio para la reflexión y el aprendizaje mediante actividades lúdicas diseñadas para involucrar activamente a los participantes, donde estos tuvieron que gestionar sus propios desechos, cargar con ellos durante un rally, responder preguntas incómodas y hasta reusarse a comer plástico.
El segundo día estuvo dedicado exclusivamente al apoyo de más de 30 proyectos, propuestas de investigación y tesis, a través de una jornada que contó con el acompañamiento de expertos que trabajaron para mejorar las propuestas específicas de los 54 participantes. Estas sesiones brindaron la oportunidad a los postulantes de competir hasta por $10.000 US de capital semilla y mentorías para llevar a cabo sus proyectos de manera efectiva y sostenible.
Avances y nuevas metas
En su primera edición en 2022, el Simposio Nacional de Plástico se centró en repensar el plástico y avanzar hacia una gestión integral para la reducción de la contaminación que generan. Esta segunda edición se centró en expandir los resultados del primer encuentro, presentando un amplio mapeo de las soluciones que se están llevando a cabo tanto a nivel nacional como internacional, lo cual ha fomentado alianzas entre los diferentes actores. Además, se resaltó el apoyo del proyecto para fortalecer la posición de Panamá ante el Comité Intergubernamental de Negociación sobre Contaminación Plástica (INC), así como al desarrollo de estrategias para el Plan de Acción Nacional de Basura Marina 2022-2027 (Panamá).
Cabe recordar que estas actividades y encuentros buscan elevar la importancia del capital natural costero de Panamá, para lo cual desde 2021 el equipo de la National Audubon Society, en colaboración con su socio local, Sociedad Audubon de Panamá, trabajan en la generación de ciencia sólida que respalde la valoración, protección y mejoramiento de los ecosistemas marino-costeros, gracias al respaldo del Fondo de Carbono Azul del Reino Unido, administrado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Para conocer las ponencias y paneles de esta segunda versión del Simposio Nacional de Plástico, siga este link.