¿Cuál es tu recuerdo más preciado de la playa? ¿Fue cuando saltaste al océano por primera vez? ¿O cuando tú y tus amigos pasaron toda la tarde construyendo un castillo de arena? ¿O tal vez, fue cuando viste a gaviotas y pelícanos, correr y volar sobre la playa, justo antes de que las olas se estrellaran contra la arena?
Aunque muchos de nosotros tenemos fuertes conexiones con las playas, las zonas costeras también juegan un papel vital para diversas especies de aves. En algunas playas de América del Norte no es raro encontrarse con charranes, rayadores, ostreros o chorlitos anidando y tratando de criar a sus polluelos. Para otras especies de aves, estas regiones costeras sirven como ricas fuentes de alimento en sus paradas migratorias.
A medida que nos adentramos en la temporada de verano, debemos tener en cuenta que las aves también necesitan playas. Afortunadamente, hay algunas acciones fáciles y útiles que todos podemos hacer para ser convertirnos en buenos líderes de la costa, asegurándonos de que tanto las aves como las personas disfruten de este recurso vital en los años venideros.
¡Mantén tu distancia!
Las zonas de nidificación y de alimentación suelen estar señalizadas con letreros y cercos durante la temporada de cría. Incluso si estas áreas no están delimitadas, vigila tus pasos para asegurarte de no molestar a las aves, cangrejos u otros animales salvajes. Asustar a una bandada de aves, ya sea accidentalmente o a propósito, las pone en peligro, ya que las aves playeras sólo pueden alimentarse en ciertas condiciones de marea. Nunca camines por una zona donde veas aves alimentándose, descansando o anidando. En su lugar, camina alrededor y las ayudarás a prosperar.
Por muy tentador que sea ver de cerca a los lindos polluelos, por favor no lo hagas. Una simple perturbación puede hacer que las aves adultas dejen sus nidos y abandonen a sus crías, a menudo con resultados mortales. Si estás demasiado cerca de un nido o de los polluelos los padres lo defenderán su nido, vocalizando en alto volumen, o fingiendo un ala rota. En cambio, admira la escena desde la distancia y lleva tus binoculares si los tienes.
Mantén a las mascotas con correa
Los perros juguetones quieren que todos se involucren en la diversión, pero sus travesuras pueden causar estragos en las colonias de aves playeras en cuestión de segundos. Las aves perciben a los perros como depredadores, incluso si ellos no los persiguen. Respeta los carteles de anidación y otras zonas prohibidas y mantén a tu mascota atada siempre que estés cerca de las aves. Y ten en cuenta que existen algunas áreas, como las reservas de vida silvestre, que no permiten mascotas, ni siquiera con correa.
Recoge tu basura
A pesar de lo que puede parecer, una montaña de basura no es divertida para las aves. Ni siquiera para las gaviotas. El alimento sobrante atrae a los depredadores que pueden atacar los nidos y las aves jóvenes. La basura muchas veces contiene materiales que son peligrosos o tóxicos para las aves. Si no ves contenedores de basura y reciclaje cubiertos o a prueba de vida silvestre en la playa, llévate tu basura y deséchala adecuadamente. Nunca entierres tu basura en la playa.
Desecha correctamente el hilo de pesca
Las aves pueden enredarse fácilmente en el hilo suelto, lo que puede atraparlas, herirlas o incluso matarlas, así que asegúrate de desechar el sedal correctamente en un contenedor de reciclaje de monofilamento. También elimina el cebo y los restos de pescado limpio, que pueden atraer a depredadores.
No alimentes a las aves o a otra vida silvestre
Esta actividad aparentemente inofensiva puede atraer a depredadores como roedores, mapaches, gaviotas y cuervos, a las zonas de anidación, donde pondrán en riesgo los huevos y los polluelos de las aves que anidan en la playa.
Evita la actividad ruidosa cerca de las áreas de anidación
Las actividades playeras como volar cometas, lanzar pelotas, hacer hogueras, encender fuegos artificiales, montar a caballo, bicicleta y cuatriciclo pueden ser muy divertidas, pero también pueden hacer que las aves dejen su nido o a las crías sin protección. Ponte en las plumas de un polluelo de ave playera, ¿cómo te sentirías si fueras del tamaño de una pelota de tenis, pesaras menos de un kilo y no pudieras volar lejos del peligro? Ayuda a las aves playeras que están anidando, evitando estas actividades.
Sé un voluntario de la playa
Las aves que anidan son una parte vital del ecosistema y un signo de una costa saludable. Enseña a otros a apreciar las aves que anidan en la playa. Para obtener más información, consulta nuestro kit de herramientas de administración de playas costeras de Audubon, o ponte en contacto con su capítulo local de Audubon o con el centro de naturaleza para saber cómo puedes ayudar.